jueves, 23 de febrero de 2012

Un poco de empatia.

Cada noche me quedo dormida con su imagen en la mente, sólo deseaba que me amara como soy... Decías que me querías, pero... ¿realmente era así? Sinceramente,  no lo creo, pues en ese caso no me hubieras dejado. Hubiéramos hablado, lo hubiera dejado por ti y hubiéramos seguido adelante con lo nuestro. Deberías haber tenido un poco de empatia, haberte puesto en mi lugar, haber pensado como yo, cómo me sentía en ese momento y si hubieras hecho lo que yo, cómo te gustaría que yo respondiera.
Ahora me siento rara, muy rara, hacía tiempo que no me sentía así, tan vacía, tan...no sé cómo decirlo, estoy feliz a ratos, antes solía sonreír todo el día, tenía una sonrisa guardada para cada uno de mis amigos, en cambio, ahora muchas veces no tengo sonrisas ni para mí misma. Varios amigos me han dicho que no soy la misma, estoy demasiado desanimada, me dicen que debo olvidarle, pero es muy fácil decirlo, todos decimos esa frase alguna vez, hasta que lo vivimos en nuestras propias carnes y nos damos cuenta de lo que duele y que no es tan fácil como se decía.
Ahora, cuando creo que no puedo estar más sin ti, miro hacia el cielo, los recuerdo y pienso..."Si he podido vivir sin ellos todo este tiempo, podré vivir sin él". He intento que así sea.

Sigo esperando al tren que me lleve a tu corazón.