Hoy he hecho la recuperación de Lengua Castellana y Literatura que me quedó suspensa este verano. Ustedes pensaréis ¿Y a mí qué? Pues... pensaba en no presentarme, ya que estaba bastante nerviosa y suelo olvidar muchas cosas, más cuando estoy nerviosa y yo pensaba:
-De todos modos pasaría de curso, tal vez no me presente o en cambio puedo ir y hacer solamente gramática, haría algo aunque, catearía si sólo hago eso.
Seguiréis pensando lo mismo ¿A mí qué me cuentas? Pues que ahora que he llegado a mi casa, me he dado cuenta de lo insegura que he sido. Sí, me he presentado al examen y lo he hecho lo mejor posible, comenzando por gramática, al llegar a literatura intentaba recordar lo que había estudiado todos estos días anteriores, y no me venía nada a la mente, absolutamente nada, por lo que comencé a repetirme para mis adentros:
-Tú puedes, te lo sabes, esto es sólo una mala jugada de los nervios...
Intentaba confiar en mí misma, ya que veía que muchas personas habían depositado toda su fe en mí, excepto yo, yo en mí misma y eso me decepcionó personalmente. Y realmente cuando me tranquilicé un poco y dejé de pensar en que lo suspendería nuevamente, comenzaron a venirme algunos datos de literatura con los que poco a poco he respondido 4 preguntas de 5 que eran, aunque no con detalles extremos, pero algo es... Si no me hubiera presentado lo hubiera cateado obviamente, al haberlo intentado he tenido una oportunidad y ...¡Quién sabe! Tal vez apruebe. Y si estoy contenta es porque he sabido confiar en mí misma.
Nunca sabrás el resultado de algo que no ha pasado, así que mejor intentarlo y salir de la duda.
